domingo, 15 de marzo de 2009

Montañas pliegues

Gilles Deleuze
Conversaciones (1988)

Basta comprender -ante todo ver y tocar- las montañas a partir de sus pliegues para que pierdan toda su dureza, y para que lo milenario se convierta de nuevo en lo que es, no simple permanencia sino tiempo en estado puro, flexiblidad. Nada es más inquietante que el movimiento incesante de lo que parece siempre inmovil.

No hay comentarios: